Enmarcado en un ambiente en el que el trabajo portuario está haciendo mella en la naturaleza, el concepto de movilidad eléctrica cobra fuerza y cada vez más se apuesta por incorporar soluciones sostenibles. En este caso, hoy nos enfocamos en los puntos de carga eléctrica en puertos para ahorrar combustible uno de nuestros posibles servicios de conectores.
El presente de la ecología portuaria
Cada año se revisan tratados que hablan sobre la contaminación. Uno de los puntos en los que nos enfocamos mucho está siendo la contaminación portuaria, siendo requerida la reducción de la contaminación tanto por emisiones de agentes contaminantes como de ruido (de los buques).
Este requerimiento hemos visto que se consigue de manera mucho más eficiente si la energía se genera en tierra y no a bordo. Esto tiene otra serie de beneficios además de esa propia eficiencia, como son un mejor ambiente para tripulantes y pasajeros así como para los trabajadores de los puertos y los residentes cercanos.
Así, se está trabajando precisamente para ello, para que se pueda generar la energía de puerto y barcos desde tierra, de manera que ayudemos al planeta, y a nosotros mismos, de muchas maneras.
Los vehículos marítimos, por su parte, tendrán que contar con un equipo de energía que se integre a la perfección con el sistema eléctrico así como con el de automatización, de manera que la transferencia de energía no se interrumpa aun cuando esta se da de tierra a mar.
Un ejemplo claro de ello en nuestro país es el del puerto de Barcelona, en el cual se han instalado 47 puntos de carga (44 para el trabajo portuario y 3 para uso público) además de aumentar la flota de vehículos, con 31 de tipo eléctrico, incluyendo motos tipo Scooter, turismos, furgonetas y tres híbridos, proyecto que ha tenido un coste de casi un millón de euros.
También en Vigo, aunque no incluyendo este punto del que hablamos hoy, se trabaja de acuerdo al proyecto Tefles, que busca el desarrollo de tecnologías en buques y puertos para reducir el impacto medioambiental que produce el transporte marítimo.
¿Cómo ayudamos, desde nuestro sector, a favorecer la movilidad eléctrica?
Los tendidos de cable en montaña son una nueva revolución que viene del norte, donde, como sabemos, nos sacan mucha ventaja en el tema de la sostenibilidad y la movilidad eléctrica. Este método destaca porque permite que el rendimiento energético sea muy alto, existiendo menos pérdidas durante su trayecto.
Por supuesto, el sistema de cableado requiere de soluciones específicas y es en este punto donde nosotros entramos en juego. Los conectores utilizados, al igual que los cables, deben diseñarse de manera que la pérdida energética sea mucho menor de lo que conocemos hasta el momento. Además, los fabricamos con una altísima resistencia, que permite que el mantenimiento sea mínimo, de manera que el usuario no tenga que utilizar recursos para esa labor.
Las instalaciones de estos tendidos se vuelven muy rentables, siendo la construcción más económica y utilizando materiales que, a medio y largo plazo, son mucho más duraderos y de alta calidad, ofreciendo mejores resultados finales, que son los importantes de cara a ayudar al medio ambiente y a ofrecer perfectas soluciones sostenibles.